viernes, 11 de noviembre de 2011


Costa Rica Emergente : movimiento de indignados (Deyanira Sequeira)
El día de hoy (11-11-11) aparece un artículo en  El País de un grupo de indignados costarricenses que se llaman  “Costa Rica emergente". Entre las Exigencias Ciudadanas están la Derogación del Plan Fiscal. Freno al pacto PLN-PAC. -Despido o renuncia de funcionarios públicos con cargos de corrupción o procesos legales en su contra, y varias solicitudes más. Los organizadores están en un sitio de facebook: https://www.facebook.com/groups/DRY.CR/ 
Como dice The Guardian, el conflicto ya no es entre izquierda o derecha, sino entre “ese uno por ciento, la corporatocracia, que sin transparencia ni rendición de cuentas reclama la tajada del león del capital y los recursos planetarios, sin importarle los procesos democráticos o este otro 99% que somos todos los demás”. Esto es bueno recordárselo al grupo “Costa Rica Emergente”, porque no hay que confundir el enemigo, que es precisamente esa corporatocracia que sobrepasa los límites de las naciones, compra gobiernos, procesos e impulsa sus propias fuerzas militares en todo el mundo. El fraude y la corrupción de este 1% es el que hunde las economías y los ecosistemas. En nuestro país, hay que buscar a quienes son los aliados de ese 1%, y no a quienes buscan construir un futuro sostenible con justicia y democracia.
En Cuatro páginas, Oscar Segura nos dice que:
“la protesta debe trascender un espacio y un tiempo determinado, la protesta debe ser incesante y llevarnos a la acción organizada sin límite de tiempo ni distinción de país. La economía debe ser para la gente, pero ello no se alcanzará en unos meses ni con la toma del poder solamente. Es urgente despertar y redefinir la forma en que nos relacionamos especialmente. La subordinación y la dependencia en la que se basa la reproducción del capitalismo y de su brazo político deben dar un giro. Para ello urge que despertemos e imaginemos formas de organización económica y política de larga perspectiva desde la solidaridad”.
No estaría de más escuchar algunas lecciones que nos dejan movimientos de protesta exitosos, citados por The Guardian:
  • La democracia es disruptiva y siempre habrá provocadores que traten de adueñarse de los movimientos para deslegitimarlos ante el público. Por eso los movimientos de protesta pacíficos corren menos riesgo de ser cooptados y cuando los militares los agreden se ponen en evidencia. Tampoco estos movimientos son cosa de un día ni de horas, sino que implica un proceso paciente de ocupación por largos períodos.
  • Los indignados necesitan recoger dinero y contratar sus abogados, pues la corporatocracia le tiene horror al sistema legal.
  • Los indignados deben tener su propia red de medios de comunicación, escribir sus opiniones y distribuirlas en las redes, y denunciar los abusos en sus propios blogs, documentando todas las experiencias con sus cámaras, sin ocultar los rostros, poque así es fácil identificar a lo provocadores.
  • Los grupos de protesta deben tener sus propias listas de eMails, y registrar a la gente que está dispuesta a cabildear o contactar a las autoridades, e incluso apoyar a ciertos diputados. O, como en la noticia de hoy, pedir la destitución de alguna funcionaria de la CCSS.
  • Hay que identificar líderes del movimiento, no los políticos que quieran cooptarlo, sino líderes propios, que surjan de las bases, porque hay que tener gente que los represente, que informe a la prensa y negocie con los políticos.
  • Estos grupos de protesta deberían mostrar un ejemplo de la clase de sociedad que queremos construir: no una de violencia y confrontación, sino una verdadera familia, como hemos visto en los movimientos de acampados de Madrid o Manhattan, en donde se comparte la comida, y la música y la alegría.
  • Más allá de una lista de demandas, como la que se menciona en la protesta de hoy, hay que construir la infraestructura de una humanidad común, de que nos habla Razeto  en su proyecto de una Nueva Civilización basada en la solidaridad de todos.